Franklin Music


lunes, 21 de mayo de 2012

LA EDUCACION DE FILANDIA

Cuando se analizan sistemas educativos de otros países y las variables de su éxito, existe la tendencia a imaginar que se podría imitar mecánicamente la experiencia, sin considerar el contexto histórico de esa sociedad. Digo esto porque me ha tocado escuchar un frenesí de comparaciones con Finlandia o con otros modelos educacionales, llámese Australia, Hong Kong o Corea, remitiéndose a un listado de esquemas educativos que carecen de sentido y quedan vacíos de contenido cultural si no se considera la historia de esos países.

En el caso del seminario al que asistí, los principales invitados, pertenecientes a la Universidad de Helsinsky, el Dr. Pertti Kansanen, ex Decano de Educación y profesor emérito; el Dr. Juhani Hytönen, director del Centro de Investigación para la Infancia y la Educación Básica, y el Dr. Orlando Mella, profesor de la Universidad de Uppsala (Estocolmo), tuvieron el cuidado de insistir en que el “modelo escandinavo” tiene sus características fundadas en la historia cultural de esos países. La invitación fue a observar su camino educacional. Para un estudio detallado de los últimos 40 años de reformas de la educación en Finlandia, pinchar AQUI (está en inglés).

¿Qué escuché estos días?
Lo primero, una contextualización histórica. Es simplista atribuir los resultados que obtienen los jóvenes finlandeses … en estas mediciones internacionales sólo al funcionamiento de su sistema educativo, como el mismo informe PISA lo reconoce.

Finlandia es un país pequeño, donde funciona el Estado de bienestar, con una sociedad democrática muy pareja e igualitaria, donde existen equiparados principios de género en la lengua, con una posición de vanguardia en investigación y alta tecnología, de cultura luterana, disciplinada y de gran tradición educativa desde la fundación de su primera universidad en 1640, la academia de Turku.
Algunos ejemplos que puedan ilustrar lo que digo.

Para la religión luterana, es importante la lectura personal de la Biblia. De hecho el propio Lutero, en un acto fundamental, la tradujo al alemán, estimulando a los propios creyentes a acceder a los textos bíblicos. Desde el siglo XVI, predicando la lealtad a la monarquía sueca, se impuso el luteranismo en Finlandia, inculcando al pueblo un fuerte sentimiento de moral cristiana. Lo más significativo, para efectos posteriores en la escuela, fue que durante 400 años pastores luteranos enseñaron a leer a los finlandeses, dado que existía la prohibición de casarse si las personas no sabían leer.

Durante el dominio sueco, Finlandia era sólo un grupo de provincias sin identidad nacional. Pero desde su anexión a Rusia en 1809 se convirtió en un ducado autónomo del zar ruso, constituyendo así su unidad nacional y territorial. Durante este período floreció el movimiento nacionalista finlandés que promovió la lengua finesa, inspirando su accionar en la literatura y los periódicos (Finlandia es uno de los países donde hoy en día, se lee más diarios), fomentando con ello, la identidad cultural de la gente, a pesar de la dominación extranjera. No es casualidad que las mujeres finlandesas fueran las primeras de Europa en alcanzar el derecho a sufragio en las elecciones parlamentarias de 1906.

Un último ejemplo. En 1921, cuando Finlandia era ya un país independiente, se implementó por primera vez una ley de enseñanza obligatoria para todos los niños y niñas mayores de 7 años. ¿Por qué a los 7 años? A las escuelas había que ir a pié o esquiando, las familias tenían miedo a los lobos, sin embargo, un niño de 7 años, por su desarrollo físico, ya puede huir de los lobos y correr para salvar la vida. Esa norma se ha mantenido vigente hasta hoy, por propia voluntad de los padres, existiendo satisfación con la calidad de las guarderías infantiles, mostrando que no hay apuro con el proceso de escolarización.

Por lo tanto, las competencias lectoras de un país tienen que ver con la historia y creencias de sus ciudadanos para la valoración de la lectura en su propia vida social, cultural o política. Por otra parte, las decisiones de enseñanza se inscriben en las cientos de experiencias históricas que van desarrollando los pueblos.

He sintetizado ocho puntos claves del sistema educativo finlandés, que escuché de estos invitados. Curiosamente para ellos, no ha sido la tecnología, ni los computadores, ni la firma Nokia, los factores diferenciadores de este “milagro educativo”. Veamos:

1. La educación escolar y universitaria es gratuita, lo cual implica el resguardo de un derecho esencial de todos los ciudadanos y una valoración del Estado como protector social. Existe homogeneidad en la calidad de los centros escolares. No hay más de 10 escuelas privadas en todo el país, conectadas con las escuelas de los sistemas Waldorf, Montessori o religiosos. Los temas educacionales no son puestos en el debate político entre los partidos.

2. La educación no está centrada en rendir pruebas ni exámenes nacionales, se enseña para aprender a ser un miembro responsable de la sociedad, ético y humano, y para dar a sus estudiantes los conocimientos adecuados para enfrentar los cambios del futuro y para seguir aprendiendo toda la vida. Existe un sentido de altruismo y cooperación más que un sentido competitivo.

3. Existe descentralización y autonomía para definir el curriculo. Cada 5 años, este se discute y modifica por parte de los propios profesores de una localidad, sobre la base de orientaciones del Estado. Esto implica que todos los profesores definen sus necesidades y participan en la generación de sus planes y programas, a través de un proceso democrático en que se involucra alumnos y apoderados a nivel local municipal.
4. La educación es inclusiva para todos y todas. Los postulantes a un centro escolar son admitidos sin exclusión por sus dificultades, tampoco hay separación de sexos. La enseñanza está centrada en el niño. Los padres pueden analizar en conjunto con los profesores el plan de aprendizaje personal de sus hijos.

5. Existe una sólida, minuciosa y gratuita formación universitaria de los profesores, (para mí el factor esencial). La profesión docente está bien considerada y valorada socialmente. Un 26% de los egresados del sistema escolar aspiran a ser profesores. Para ingresar a las carreras de pedagogía se hace una rigurosa selección, sólo es admitido cerca del 10% de los postulantes. Lo más relevante en el examen de selección son las características personales y la vocación del postulante a pedagogía. Lo básico de la formación de un profesor es que tiene que aprender a realizar investigación, manejar teorías, adquirir competencias metodológicas y de metacognición, a producir conocimiento a través de resultados de estas indagaciones, transformándose en experto investigador. Al mismo tiempo tienen un 30% de su aprendizaje como práctica, en estudios de casos y resolución de problemas reales. Esto permite que los maestros no sean meros repetidores de conocimientos, sino personas con gran capacidad reflexiva. El constructivismo se practica en detalle. Se les exige un grado de Maestría según los acuerdos de Bologna, para lo cual tienen que hacer una tesis de investigación. Los profesores que quieren tienen acceso directo al Doctorado.

6. En el caso de los profesores de la escuela básica, hasta el nivel de 6° grado, están preparados para enseñar con solidez todas las asignaturas del plan de estudios. Durante más de 5 años, deben formarse en lenguaje, matemáticas, ciencias naturales, historia, ética, estética, religión y tecnología, en música y artes, en literatura infantil y drama, en educación física y manualidades, además de adquirir conocimientos de educación especial. Aprender métodos de enseñanza tiene menor importancia que la capacidad de un profesor para reflexionar y tomar decisiones en función de su práctica pedagógica. No existen evaluaciones formales de desempeño de los profesores, se confía en ellos. Los profesores tienen libertad pedagógica, dado que son expertos en sus áreas. Los sueldos están en el rango medio, fluctuantes alrededor de los 2500 dólares mensuales (con todas las consideraciones de contexto económico del país).

7. Un día escolar: en la básica entre 8 y 9 horas, los pre-escolares sólo 4 horas (700 horas anuales, 6 orientaciones de contenido diferentes), los mayores 6-7 horas diarias. El número de alumnos por clase: 26 en la básica, 36 en la media. No hay deserción escolar, no hay alumnos repitentes, todo el grupo etáreo pasa de curso y los profesores son 100% responsables de que sus alumnos aprendan. A las 15 horas los profesores terminan su labor, luego desarrollan tareas administrativas, corrigen trabajos y elaboran sus proyectos. Recuerden que según la época, en esas latitudes anochece a las 4 de la tarde.
8. Existe un gran sentido de responsabilidad social de la escuela por practicar la cooperación en distintos aspectos de la disciplina escolar. Destaco el esfuerzo especial hacia aquellos alumnos con más dificultades de aprendizaje o adaptación, quienes reciben atención especial dentro de la educación ordinaria, a cargo de equipos formados por alumnos, profesores, sus padres y otros expertos. Es importante destacar que esta responsabilidad se extiende hasta el sistema carcelario finlandés donde se imparte la educación básica a los reclusos.
Cada uno y cada una, no saque todavía sus propias conclusiones. Siga investigando.

Décimo Boletín de la JCE: PLD 51.24% y PRD 46.93%

El décimo boletín de la Junta Central Electoral sobre los resultados de las elecciones presidenciales del país otorga el 51.24 por ciento de los votos escrutados hasta ahora al Partido de la Liberación Dominicana y 46.93% para el Partido Revolucionario Dominicano cuando restán 129 colegios electorales por computar.

El PLD y sus aliados obtuvieron 2 millones 302 mil 746 votos válidos de un total de 4 millones 493 mil 788. Mientras el PRD obtuvo 2 millones 109 mil 123 votos válidos.

sábado, 12 de mayo de 2012

Tips para leer más y mejor

Estudios realizados demuestran que los niños y niñas que leen por 15 minutos al día, ven un promedio de más de un millón de palabras al año.

Como le hemos dicho siempre, confiamos en el juego y la lectura como poderosas herramientas para hacer nuestros habitos saludables.

Es un hecho, lo comprobamos a diario, los/as niños/as disfrutan de leer, aún más cuando es en compañía de sus padres, por eso, esperamos que estos tips sean de ayuda para hacer de la lectura un hábito disfrutable que te traiga un montón de beneficios.

Numerosos estudios indican que el tiempo que los padres invierten leyendo a sus hijos/as no puede ser reemplazado. Por este motivo y con el objeto de fomentar la participación de los padres en los hábitos de lectura de sus hijos/as, la campaña "READ California" recomienda lo siguiente:

1. Empiece temprano. Cuando usted lee a sus hijos/as pequeños/as en voz alta, ellos aprenden las palabras y los sonidos que más tarde necesitarán para leer por sí solos.

2. Dé el ejemplo. Los niños imitan lo que ven. Cuando usted lee un libro o el periódico, sus hijos o hijas aprenden que leer es importante.

3. Siempre tenga libros. Vaya a la biblioteca pública o librería con sus hijos/as y ayúdeles a escoger sus propios libros. Pídales que traigan algunos libros a la casa de la biblioteca escolar. Compre libros en ventas. Sugiera a su familia y amigos que den libros como regalo a sus hijos/as.

4. Aparte un tiempo y lugar para leer. Para muchos padres la hora de ir a la cama es el tiempo ideal. Su hijo o hija se relaja y también puede quedarse dormido más fácilmente.

5. Lean juntos. Sus hijos/as se sentirán especiales, y los/as niños/as pequeños/as pueden seguir las palabras mientras usted lee. No deje de leerles aún cuando los/as niños/as ya puedan leer por sí solos. Lea libros más difíciles en voz alta o tomen turnos para leer las páginas alternadamente. Anime a sus hijos/as adolescentes a que lean a sus hermanos menores.

6. Trate de hacerlo divertido. Por ejemplo, pídales a sus hijos/as que hagan diferentes voces para cada personaje en las historias que leen.

7. Haga conexiones. Deje que sus hijos/as sepan que la lectura es una herramienta que puede ayudarles a hacer lo que ellos deseen. Cuando lean un libro, platiquen acerca de lo que aprendieron.

8. Ayude a sus hijos/as a participar en la lectura. Mientras leen juntos, comparta ideas y haga preguntas: ¿Qué piensas que va a pasar? Platíqueles de lo que piensa acerca de la historia. El platicar con sus hijos/as les ayudará a reforzar la habilidad de escuchar y hablar, la cual necesitan para ser buenos lectores.

9. Recuerde cuán importante es la lectura. Estudios realizados demuestran que los/as niños/as que leen por 15 minutos al día, ven un promedio de más de un millón de palabras al año.

Según READ California, el leer juntos con sus hijos todos los días es lo más importante que usted puede hacer para ayudarles a tener éxito en su educación y en la vida.
¡Empieza a leer hoy, experimenta los beneficios, atrévete, vence tus propios límites!

Fuente: Nutricampeones

Prepararse para los exámenes

No dormir la noche previa al examen o repasar el temario en el último momento pueden ser las causas principales de reprobar una prueba.
Una de las palabras más temida y respetada por los estudiantes: el examen. Una vez finalizado el semestre o el curso, el profesor/a tiene que evaluar los conocimientos y aptitudes que el alumno/a ha adquirido durante ese periodo y la manera habitual de hacerlo es mediante una prueba oral o escrita.

Prácticas habituales como jornadas interminables de estudio días antes de los exámenes, noches sin dormir o intentar repasar todo en el último momento son métodos que están lejos de beneficiar al estudiante en los resultados.

Antes del examen

Lo más importante a la hora de preparar un examen es planificarlo con antelación, no dejarlo para unos días antes, ya que esto puede llevar a acumular en un breve periodo de tiempo un exceso de información que difícilmente ayudará a obtener los resultados deseados.
El tiempo será el mejor aliado para poder poner en práctica las principales técnicas de estudio que facilitan el proceso de aprendizaje, porque no se trata sólo de estudiar, sino de hacerlo con método.
Estudiar y comprender son términos que están íntimamente ligados. Si no se ha comprendido lo que se ha estudiado, difícilmente se podrá recordar en el momento de hacer un examen. Tal como recoge Luís M. Martínez Domínguez en su libro 'El estudio de los hijos: soluciones para padres', "el estudio para que sea eficaz debe ser activo".

¿Qué significa esto?, pues que leer sin más, memorizar o copiar lo que pone en el libro o cuaderno son actividades pasivas que no posibilitan la comprensión de lo estudiado, sin embargo, utilizar técnicas de aprendizaje como el esquema, el subrayado o el resumen son comportamientos activos que facilitan la comprensión de la materia.

Miguel Salas Parrilla, en su libro “Cómo preparar un examen con eficacia”, recoge los pasos fundamentales en el estudio de un texto o de un tema aplicando estas técnicas: en primer lugar, se debe realizar una lectura rápida de lo que hay que estudiar, para tener una idea general de los contenidos; posteriormente, es necesaria una segunda lectura analítica subrayando las ideas más importantes, y a continuación, elaborar un esquema que servirá de base para hacer un resumen del tema. Para finalizar, es importante, asimismo, repetir de forma oral o por escrito el esquema y repasar todo.

Como apunta Parrilla, estas técnicas permiten tener una información lógica y visual de lo que se está estudiando.

El esquema "permite fotografiar la estructura del tema destacando las ideas principales y los nexos de unión entre ellas y de subdivisión con respecto a las ideas secundarias que de ellas dependen", mientras que el resumen "acostumbra al alumno/a a redactar el tema sin olvidar ninguna idea importante y relacionar ideas entre sí, estableciendo los nexos de dependencia y subordinación".

Por supuesto, si este trabajo se ha realizado con antelación, durante el transcurso del semestre, será más fácil y más rápido asimilar y memorizar los contenidos que si se deja para el último momento.
Pero además de estudiar, hay una serie de aspectos que el alumno/a debe tener en cuenta antes del examen para poder prepararlo eficazmente.

En primer lugar, siempre será de ayuda prestar la debida atención al profesor/a en clase, atendiendo a los puntos en los que hace más énfasis, ya que estos temas tendrán siempre más probabilidad de salir en un examen; también es importante que se anoten las dudas que surjan durante el desarrollo de la clase y se consulten posteriormente con el profesor/a.

Por otra parte, es fundamental conocer las prácticas habituales del profesor/a cuando programa un examen: qué tipo de examen suele poner, su forma de calificar, si suele repetir las mismas preguntas, a qué le da más importancia... para ello, además de preguntar al profesor/a, sería interesante consultar con alumnos/as de años anteriores, ellos podrán facilitar las mejores pistas para hacerse una idea del examen al que hay que enfrentarse.

Y llegó la noche antes del examen. Si hay algo en que coinciden la mayoría de los expertos en el tema es que la noche antes de presentarse a un examen hay que descansar.

Lo recomendable sería dejar de estudiar en torno a las diez de la noche y después realizar alguna actividad relajante como escuchar música, ver televisión o darse un baño.

Eso sí, antes de acostarse, es imprescindible revisar que se cuenta con todo el material necesario para realizar el examen: más de un bolígrafo, calculadora si se permite, documento identificativo si es necesario o cualquier otro material que el profesor/a haya indicado en clase.

Fuente: www.consumer.es

Ecuaciones




¿Qué es una ecuación?

Una ecuación es una igualdad entre expresiones algebraicas que se cumple solamente para algunos valores de las letras.


4x – 3 = 2x +1
Esta igualdad sólo es cierta si

x=2


¿Qué elementos tiene una ecuación y cómo se llaman?

MIEMBROS: son las expresiones que aparecen a cada lado del signo =

TÉRMINOS: son los monomios de cada miembro

INCÓGNITAS: Son las letras que aparecen en la ecuación

GRADO DE LA ECUACIÓN: es el mayor exponente con que figura la incógnita (una vez realizadas todas las operaciones)

SOLUCIONES: son los valores que deben tener las incógnitas para que la igualdad entre los miembros sea cierta


En  

                                                         4x-3= 2x + 1
la solución es
x = 2





viernes, 11 de mayo de 2012

LIDERAZGO ADMINISTRATIVO: RETO PARA EL DIRECTOR DE ESCUELAS DEL SIGLO XXI


 LIDERAZGO ADMINISTRATIVO: RETO PARA EL DIRECTOR DE ESCUELAS DEL SIGLO XXI
Por: Castillo Ortiz, Alicia. (2005). Liderazgo administrativo: Reto para el director de escuelas del siglo XXI. Cuaderno de Investigación en la Educación, 20, 34-51.


Sumario 

Las nuevas tendencias en el campo de la administración educativa señalan al director como el líder de la escuela. Una de las dimensiones cruciales en el ejercicio de sus funciones es la de ejercer liderazgo administrativo hacia el logro de la visión de la institución.


El director de escuelas, como líder administrativo debe tener el conocimiento, las destrezas y atributos para entender y mejorar la organización, implantar planes operacionales, manejar los recursos fiscales y aplicar procesos y procedimientos administrativos descentralizados. Tienen a su cargo la fase operacional de la escuela con el propósito de lograr la visión, la misión, las metas y los objetivos institucionales.

En este artículo se explica cómo el director debe ejercer esta dimensión del liderazgo para tener éxito en la escuela como una comunidad de aprendizaje.
Palabras claves: liderazgo administrativo, director de escuelas, funciones, fase operacional.


 Para facilitar la lectura se utilizará el género masculino al hacer referencia a ambos sexos.  Las nuevas tendencias en el campo de la administración educativa señalan al director como el líder de la escuela. Esta es una gran responsabilidad, ya que el ejercicio del liderazgo tiene una variedad de dimensiones en las que se debe focalizar el director para convertirse en el líder que necesitan las escuelas en el siglo XXI.


Una de las dimensiones cruciales en el ejercicio de sus funciones es la de ejercer liderazgo administrativo. Esto requiere que cada director de escuelas posea el conocimiento, las destrezas y los atributos para entender y mejorar la escuela como organización y atender todos los asuntos relacionados con la operación adecuada de la escuela.


El director de escuelas, como líder administrativo, está a cargo de la fase operacional de la institución, así como la responsabilidad de planificar, organizar, coordinar, dirigir y evaluar todas las actividades que se llevan a cabo en la escuela. El dominio de estas competencias permite realizar con eficacia las prácticas administrativas correspondientes hacia el logro de la visión, la misión, las metas y los objetivos institucionales.

A través de los años, los directores de escuela habían llevado a cabo todos estos procesos administrativos de la forma tradicional. El director era la máxima autoridad en la escuela, pero esta autoridad estaba limitada por las leyes y reglamentos escolares.

 La responsabilidad en la toma de decisiones estaba ubicada en el nivel central del Departamento de Educación, siguiendo el patrón de una estructura burocrática, según definida por la teoría de Max Weber. El sistema educativo era uno altamente centralizado, lo que estaba totalmente en contra de todas las tendencias contemporáneas en el campo de la administración.


En los últimos quince años han ocurrido grandes cambios en el sistema educativo puertorriqueño. La aprobación de la Ley 68 de 1990, la Ley 18 de 1993 y la Ley 149 de 1999 ha tenido un impacto muy grande en las escuelas en Puerto Rico. Estas leyes dieron paso a procedimientos nuevos para atender los diferentes procesos en el Sistema de Educación Pública. En especial, la Ley 149 presenta una serie de cambios en la estructura y la organización del Sistema, muy en especial en las diferentes tareas que tendrán que realizar los administradores en los diferentes niveles jerárquicos.


Estos administradores, en especial los directores de las escuelas, deben estar preparados con las competencias necesarias para promover e implantar los cambios que les corresponden como líderes administrativos de la institución. Por esta razón, el director escolar debe tener una visión clara del liderazgo administrativo, las teorías, los procesos y los principios que utilizará como base para atender todas las situaciones que se le presenten. Su responsabilidad mayor es la de implantar los planes operacionales aplicando los procedimientos administrativos descentralizados.

El director de escuelas como líder administrativo tiene esta función para facilitar la labor de los docentes llevando a cabo todos los procesos necesarios para que se pueda mejorar la calidad de la educación.


El trabajo del líder administrativo no es fácil. Va a dedicar su tiempo a los asuntos operacionales, pero sin perder de perspectiva que la finalidad de la escuela es propiciar el logro de la excelencia académica. Por tal razón, presentaré algunos aspectos importantes en torno a la función del líder-administrador, para analizar posteriormente la aplicación de estos principios al liderazgo administrativo en las escuelas de Puerto Rico.





La administración es una de las funciones indispensables para la vida en sociedad. Ésta existe en todas las áreas del diario vivir, incluyendo los hogares, las iglesias, el gobierno y las empresas económicas. Por eso, todos los líderes verdaderamente importantes de la historia fueron administradores, unos administrando países, otros conduciendo exploraciones y guerras, y otros manejando las organizaciones socio-económicas de un pueblo.


Mary Parker Follett (citada por Stoner, Freeman y Gilbert, 1997) define la administración como “el arte de lograr que se hagan ciertas cosas a través de las personas”. Esta definición enfatiza que los directivos cumplen las metas de la organización facilitando el que otros desempeñen las tareas que se requieran, no haciéndolas ellos mismos.


Según Stoner, Freeman y Gilbert (1997) la administración es el proceso sistemático de planificar, organizar, dirigir y controlar los esfuerzos de los miembros de la organización, y de aplicar los demás recursos de ésta para alcanzar las metas establecidas. El proceso administrativo, por tanto, no es una serie de funciones separadas que puedan ser efectuadas independientemente. La administración es un proceso compuesto de estas partes. Ninguna de estas funciones puede llevarse a cabo sin incluir a las demás, pero utilizando a las cuatro como un proceso compuesto (Castillo Ortiz, 2000).


El administrador lleva a cabo su tarea para generar un medio ambiente que facilite la participación coordinada de todos los miembros del equipo de trabajo. La proporción en que se use cada elemento varía para cada tarea administrativa e inclusive pueden variar a través del tiempo para el mismo trabajo. Por tanto, la función total de un administrador, según Drucker (1993) es determinar los objetivos colectivos de una organización y generar el medio ambiente adecuado para su logro.


La administración consiste en lograr objetivos con el uso de otros participantes. Es un proceso sistemático de hacer las cosas. Los administradores requieren de sus habilidades, aptitudes y atributos para realizar ciertas actividades interrelacionadas con el fin de lograr las metas deseadas.
Para llevar a cabo la gestión administrativa, se requiere: proyectar con anterioridad sus metas y acciones, tener algún método, plan o lógica para hacer el trabajo, coordinar los recursos materiales y humanos de la organización, dirigir e influenciar a sus subordinados, crear la atmósfera adecuada para que los subordinados hagan su mejor esfuerzo y asegurar que la organización siga la dirección correcta para lograr sus metas (Maldonado, Montes, Castillo y Vázquez, 2000)).


La efectividad de una organización depende de la capacidad del líder para ordenar los recursos que permitirán lograr las metas institucionales. Mientras más integrado y coordinado esté el trabajo de una organización, más eficaz será la misma. Obtener esa coordinación y lograr un espíritu de grupo forma parte del trabajo del administrador.


La habilidad del director como líder administrativo tiene una gran influencia en la aceptación del cambio. De hecho, el mejor uso de los recursos humanos a través del trabajo en equipo y la cooperación entre las diferentes funciones de la organización aumentará la velocidad en que se introducen los cambios y las innovaciones, y reducirán la resistencia y el conflicto que puede ocurrir ante el inicio de proyectos nuevos en la escuela. Lo importante es estar pendiente de los efectos a largo plazo de estos cambios e innovaciones, usando los menores esfuerzos posibles de energía, recursos y tiempo (Castillo, 2001). Por esta razón, el estilo colaborativo es el más adecuado para introducir los cambios y aumentar la productividad.